jueves, 24 de febrero de 2011

Balanza

Dos al cuadrado divido 4 es igual 4 partido por su mismo nº, nadie lo entiende, de qué esta hablando este tipo tan perspicaz. Autoestima, nada que ver con los números, mentira. Juan Ignacio siempre pensaba asi, todo los dias veia salir desde su casa a su padre y su madre a trabajar temprano en la mañana y siempre se preguntaba ´´para qué trabajan ambos si con un salario alcanza?``. Entre lágrimas y luces lloraba por su témpestad diaria, vivir solo, cómo si la vida caminara sola. Creció y poco a poco se fue dando cuenta que los zapatos no tienen pie y que los pies sin zapatos no incomodan en un mundo tan segregado como el actual. Pidió de todo, perdio todo, sin preocuparse por el del lado. Veo fotos en redes que me ayudan a manejar de mejor manera mis tiempos y me doy cuenta que aun que hay personas que demuestran ser una persona por fuera, son distintas por dentro. Juan Ignacio, perdio la sencilles, pero conservo algo que jamás perdio, su amabilidad y luchar por el otro frente a todo. Luego que perdiera lo que más quería en la vida, sus lujos económicos.

domingo, 20 de febrero de 2011

Acorralado

´´Papá vamos terminan como lo dice el Apestoso Fes en la película?``, atónito, como fuera aquella vez que tres almas cruzaron un puente en común que se collerón y volvieron a juntar. ´´No lo sé, el tiempo decidirá``. Mente con sangre fría donde debería estar caliente, neuronas congeladas y puertas que se abren. Recuerdos que escurren fácilmente por un horizonte que cuesta ver , tapado por la proa de un barco que circula vertical en el horizonte. Matemática pura en ámbitos donde ni las letras pueden expresar sentimientos y los sentimientos no lo pueden expresar las letras. Basta con seguir preguntando. Mi hijo, un principito que corre por calles de un libro que escribo cada día sin darme cuenta. ´´Papá, te puedo pedir un favor? Comprarme ese libro llamado principito?``. No cuestionaré tus decisiones por querer, quiero que seas mejor que yo. Acorralado entre sentimientos encontrados. Creces pero a la vez es cada vez menos tiempo que me queda para disfrutar. Crecen nuestros sentimientos, los trasformamos en lápices que hablan al escribir en hojas que jamás vemos pero guardamos en nuestros choques eléctricos. Los libros ayudan, las letras y números ayudan a llegar a lo exacto. Lo invisible no es exacto y lo exacto es invisible. Vemos lo que quiero ver y yo hijo, quiero ver tu invisibilidad no en lo exacto de saber, si no en lo exacto de entender y esto sea invisible pero que refleje un rayo incidente que rebote de manera de bisectriz.
Las historia las gomas y correctores las pueden borrar, solo el ser humano es capás de borrar por su propia conciencia y es hay donde los errores vuelven a caer y no quiero que ocurra contigo.

domingo, 13 de febrero de 2011

La verdad de la mentira

Julio, una persona interesante, corria por campos de caballos de una vida que muchos creian conocerla completamente, pero pocos sabian lo real que era. Invensible para todos, corre que corre como caballo inglés, ese mismo caballo que batalló, corrio, calló y se levantó mis veces, y que ahora se ve derrotado en persona por solo palabras. ´´Pensar`` se dijo´´que las personas creen lo invesible como algo que nunca puden derrotase, creen creerse invensibles por solo no ver lo que realmente se ve, y cubren aquello que quieren ver pero se les olvida q estan ahy``. Julio, como no recordarte. Tú mismo me declareste que era de las pocas personas q te conocen tan bien, y creo no te equivocaste. covarde que nunca se atrevió a decir las cosas verdaderamentes importantes, criticaste hasta el más mínimo detalle y todo el mundo se molestaba, pero a tí no te importaba sabiendo que era para mejor. La mentira se acabó un día para tí y esta historia queda hasta aquí.